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Durante las semanas previas a diciembre, el ambiente de la capital empieza a transformarse. La Navidad en Madrid es una mezcla deliciosa de tradición, modernidad y luces que llenan las calles de energía festiva. Familias, turistas y curiosos se reúnen cada tarde para disfrutar de ese brillo tan característico que solo Madrid tiene en estas fechas.
Cada año, las luces de Navidad de Madrid se convierten en uno de los planes más fotografiados. La Gran Vía, la Puerta del Sol, el Paseo del Prado o el barrio de Salamanca se iluminan con diseños que cambian edición tras edición.
Y para quienes quieren vivirlo sin perder detalle, el famoso Naviluz es un clásico: el autobús navideño que recorre los puntos más emblemáticos y permite observar la decoración de una forma cómoda y especial.
Las casetas rojas del Mercado de la Plaza Mayor son uno de los símbolos de la Navidad madrileña. Aquí conviven figuras de belén, adornos para el árbol y bromas tradicionales que ya forman parte del folclore de estas fiestas.
Otros mercados que merece la pena visitar son:
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Feria de Artesanía de la Comunidad de Madrid, en Plaza de España.
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Mercado navideño de Castellana, con propuestas gastronómicas y artesanales.
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Mercados alternativos con productos locales, perfectos para regalos especiales.

Madrid ofrece una agenda navideña llena de actividades. Las pistas de hielo en lugares como Matadero, Cibeles o Plaza de España invitan a disfrutar en familia. Los belenes tradicionales, especialmente el del Palacio Real y el del Ayuntamiento, atraen cada año a miles de visitantes.
A esto se suman espectáculos, musicales, rutas de belenes, talleres infantiles y conciertos que llenan la ciudad de planes para todas las edades.
Sabores típicos que hacen de Madrid un destino dulce
La gastronomía también tiene su protagonismo. Los dulces tradicionales de Navidad, como el roscón de Reyes, el turrón o los polvorones, se encuentran en pastelerías de toda la ciudad. Y nada mejor que acompañarlos con un chocolate caliente en una de las chocolaterías más míticas, porque en Madrid el invierno siempre sabe un poco a cacao.
Y si después de recorrer luces, mercados y planes buscas un momento de calma, una de las mejores formas de completar la experiencia navideña es regalarte un respiro. En Hammam Al Ándalus, tanto en Plaza Mayor como en Puerta de Hierro, podrás desconectar con un baño árabe tradicional lleno de serenidad. Y si prefieres una experiencia de bienestar más exclusiva, nuestro centro de masaje premium Halmma te espera para reconectar cuerpo y mente en un entorno único. Una pausa perfecta para disfrutar Madrid también desde la tranquilidad.